En general suelo ser más bien un animal de hábitos nocturnos pero hoy toca lavarse bien la cara para preparar un desayuno con fundamento, ¡tortitas!
A todos se nos hace la boca agua al ver una buena pila de tortitas perfectamente doradas con una cascada de sirope deslizando mientras las empapa delicadamente.
Hay muchas recetas muy famosas de las que podemos encontrar miles de versiones por internet, y las tortitas no iban a ser ninguna excepción.
He probado ha hacerlas muchas veces, siguiendo diferentes recetas e intentando emplear muchos trucos pero la tortita perfecta sólo la he conseguido con esta:
- 1 huevo
- 1 taza de harina
- 1 taza de leche
- 1 cucharada de aceite
- 2 cucharadas de azúcar
- 1 cucharada de levadura química
- Una pizca de sal
- Mantequilla para engrasar la sartén
Comenzamos mezclando el huevo con la leche, el aceite y el azúcar. A esta mezcla de ingredientes húmedos le añadiremos la harina mezclada con la levadura y la sal y batiremos bien todo.
Calentamos la sartén a fuego medio-bajo y, cuando el empiece a coger temperatura, la engrasamos con mantequilla.
Echamos la masa y esperamos a que empiecen a formarse burbujas en la superficie de la masa, cuando esto ocurra los bordes deberían estar bastante asentados, y será fácil darles la vuelta con una espátula.
Puede que la primera no salga muy bien, si la sartén aún no ha cogido la temperatura adecuada o si aún no tenemos mucha confianza al darles la vuelta, pero es completamente normal y las siguientes irán saliendo cada vez más bonitas.
Lista para darle la vuelta
Si, en lugar de coger un tono dorado uniforme, las tortitas se muestran algunas zonas circulares muy tostadas mientras que otras están muy blancas es probable que el fuego éste demasiado alto, bajadlo y esperad un poco para que se enfríe antes de hacer la siguiente.
También puede ocurrir que la mantequilla no esté bien repartida y esté cocinando la tortita de forma desigual; si esto ocurre podéis ayudaros con un trocito de papel de cocina para repartirla mejor.
Recordad también que puede hacer falta echar más mantequilla según vayamos haciendo tortitas, según vayáis haciendo más tortitas notaréis enseguida si les hace falta más o no. Cuando tienen suficiente no quedan grasientas pero se les puede dar la vuelta con mucha facilidad.
Esta vez he modificado un poco la receta básica y he añadido a la masa un plátano triturado y una pizca de canela para después servirlas con un poco de mantequilla y sirope de arce.
Espero que mis consejos os hayan sido de ayuda. ¡Buen provecho!
¡Nos vemos en la próxima entrada!